La DSI es algo propio de nuestra fe, que se aprende en la misma Historia de la Salvación: en la interacción de la Palabra de Dios con la realidad humana y la respuesta de los hombres y mujeres cristianos. Estos principios tienen un carácter teórico, pero a la vez son eminentemente prácticos y dinámicos, ya que pretenden conseguir un orden social más acorde con la visión teórica. Todos son aplicables a la sociedad en general, aunque algunos tienen una mayor aplicación de orden sociopolítica, otros socio-económica, otros socio-cultural etc. De una manera esquemática, y sin profundizar en su contenido, podemos citar los siguientes:
Dignidad de la persona la persona humana, por estar hecha a imagen y semejanza de Dios, posee una dignidad superior a la de los demás seres creados. La unidad de la persona, con cuerpo y alma, la libertad de la misma, la igual dignidad de todas, la sociabilidad y el respeto a los derechos humanos se constituyen en elementos definitorios de la misma. Todos somos responsables de conseguir el bien común, tanto las personas como el Estado.
Destino universal de los bienes Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todos los hombres y pueblos. En consecuencia, los bienes creados deben llegar a todos en forma equitativa bajo la égida de la justicia y con la compañía de la caridad.
Subsidiariedad protege a las personas de los abusos de las instancias sociales superiores e insta a éstas últimas a ayudar a los particulares y a los cuerpos intermedios a desarrollar sus tareas. Este principio se impone porque toda persona, familia y cuerpo intermedio tiene algo de original que ofrecer a la comunidad.
Participación el ciudadano, individualmente o asociado a otros, directamente o por medio de los propios representantes, realiza unas actividades gracias a las cuales contribuye a la vida cultural, económica, política y social de la comunidad civil a la que pertenece. La democracia se configura como un elemento fundamental.
Solidaridad Este principio se configura como característica fundamental del carácter social del individuo. El individuo está dispuesto a poner a disposición del prójimo parte de su propia humanidad.
Valores fundamentales de la vida social los principios que deben presidir la edificación de una sociedad digna del hombre, indica también valores fundamentales. Entre estos ocupan un papel central la verdad, la libertad, la justicia y la caridad.
EVOLUCIÓN DE LAS CIRCUNSTANCIAS HISTÓRICAS
La DSI va evolucionando al compás de las modificaciones de las circunstancias sociales Pablo VL, en OA 42, señala como factores de está evolución: •“La reflexión madurada al contacto con situaciones cambiantes de este mundo bajo el impulso del Evangelio como fuente de renovación”, •La sensibilidad propia de la iglesia, marcada por la voluntad desinteresada de servicio y la atención a los más pobres ” •“Su experiencia multisecular que le permite asumir innovaciones atrevidas y creadoras”